Desde el pasado martes 7 de julio el Club Waterpolo Pontevedra, tras casi 4 meses, ha retomado su actividad volviendo al agua. A pesar de que durante los meses de confinamiento algunos deportistas del club continuaron entrenando en sus casas conectados por vídeo, por fin han podido volver a encontrarse cara a cara y entrenar de nuevo en su medio, el agua.
Gracias a Supera algunas categorías han vuelto al Complejo Deportivo Rías o Sur para entrenar con ciertas medidas de seguridad (límite de 16 deportistas por grupo, distanciamiento de 2 metros, quitando la mascarilla sólo para ir al agua…). Así, desde benjamines hasta el absoluto femenino ya se han estrenado entre el martes y el miércoles con las nuevas medidas, salvo los cadetes que lo harán el viernes.
En cuanto al equipo absoluto masculino, gracias a la inestimable colaboración del Centro Galego de Tecnificación Deportiva de Pontevedra y la Secretaría Xeral para o Deporte, también ha comenzado a entrenarse en la piscina del CGTD desde este martes, con un límite de 12 deportistas y con un control de medidas de prevención.
A falta de confirmar el inicio, el CW Pontevedra también cuenta con permiso de la Secretaría Xeral para o Deporte para poder entrenar en las instalaciones del Complexo Náutico e Campo de
Regatas David Cal en Verducido, Pontillón do Castro,con la colaboración de la Federación Galega de Piragüismo. En cuanto las autoridades competentes (FEGAN y Secretaría Xeral para o Deporte) autoricen a iniciar los entrenamientos más específicos de waterpolo, el club podrá instalar en el Pontillón un campo para entrenar en verano.
Ahora toca recuperar la forma física y pensar ya en la próxima temporada 2020-21.
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